La naturaleza esencial.
La naturaleza esencial es pura en su origen y dotada de miríadas de virtudes, pero existen diferenciaciones a causa de las impuras o puras condiciones. Los sabios lo comprendieron y sólo la utilizan en su forma más pura, y de ese modo alcanzan la Iluminación, mientras que la gente común no se da cuenta de ello y sólo la utiliza en su forma impura sumergiéndose en sus mortecinas rutinas. Pero en ambos casos la esencia es la misma; de ahí que las escrituras de la trascendental sabiduría digan: «No hay dualidad o división, porque no existe disyunción o separación alguna».
Ta-sui
Las enseñanzas del zen.
Selección de Thomas Cleary.