Deja la mente en libertad.
Se ha formulado la pregunta: «Los que inician el camino, ¿cómo deben aplicar sus mentes?». Todas las cosas, en su esencia, son no-creadas e imperecederas. Deja que tu mente sea libre; no tienes por qué refrenarla. Percibe y escucha directamente; ven y ve directamente. Cuando debas ir, ve; cuando debas permanecer, quédate. Éste es el auténtico camino. Una escritura dice: «La existencia condicional es el asiento de la Iluminación, siempre que conozcas cómo es en realidad».
Niu-t'ou Hui-chung (683-769)
Las enseñanzas del zen.
Selección de Thomas Cleary.