THOMAS CLEARY - La luz espiritual - Escuela Malliesa.

La luz espiritual.

"La luz espiritual brilla con independencia, trascendentalmente liberada de los órganos y objetos de los sentidos". Esta frase lo dice todo. Si la comprendes, ¿quién puede acusarme de hablar demasiado? Si no la comprendes, continuaré y complicaré un poco más las cosas.

La luz espiritual de los seres vivos, en su origen, carece de obstrucción; sin embargo, viven sumergidos en la ignorancia, engendrando confusos sentimientos. En relación con esto están los seis órganos sensoriales en el interior, y en el exterior los objetos de los seis sentidos: a través de la oposición de órganos y objetos, surge de forma incontrolada la falsa conciencia que crea el bien y el mal y que da inicio a acciones virtuosas y malvadas. A causa de estas acciones, los seres vivos giran como una polea en torno a distintos estados mundanos, ola tras ola, era tras era, emergiendo y hundiéndose eternamente. Los budas se compadecieron de ellos y les expusieron la gran enseñanza para aclararles aquella luminosa e independiente luz espiritual.

Si la luz espiritual no se oscurece, los órganos y objetos desaparecen de repente, la mente es olvidada, y el mundo permanece silencioso: la vasta conciencia lo impregna todo, la sustancia del despertar aparece tal cual es.

Pero si no puedes percibir esa luz, necesitas seguir un método. El método no es pedirle a alguien que te lo explique, o estudiar las escrituras, o llevar a cabo numerosos actos caritativos, o cerrar los ojos y permanecer sentado como un cadáver. Sino que a lo largo de tus actividades cotidianas debes plantearte con intensidad esta pregunta: ¿Cuál es mi rostro original? No pienses acerca de si será fácil o difícil, o sobre si tardarás mucho o poco en averiguarlo; y no ha de preocuparte si crees que tus facultades y tu potencial son lentos y torpes, o que tienes un gran obstáculo por tus pasados hábitos. Simplemente decídete e indágalo; después de mucho tiempo, de improviso, lo acabarás encontrando.

Yuan-hsien (1618-1690)


Las enseñanzas del zen.
Selección de Thomas Cleary.